¿Hasta donde llenar la piscina de casa? Se trata de una pregunta bastante habitual entre las personas que acaban de adquirir o instalar una piscina. Mantener el nivel óptimo del agua es muy importante para lograr que todos los sistemas de la piscina funcionen de manera correcta, por lo que es imprescindible saber hasta dónde llenarla.
Llenar la piscina, una cuestión compleja
Llenar una piscina puede parecer sencillo, en ocasiones se puede pensar que simplemente hay que abrir la manguera y dejar correr el agua, pero nada más lejos de la realidad. Conseguir el nivel de agua correcto es fundamental.
Un llenado preciso permite que los sistemas de depuración hagan su trabajo de una manera cómoda y sin forzar los equipos. Gracias a ello, se consigue aumentar la vida útil de los mismos y mejorar la calidad del agua de la piscina.
A la hora de dejar correr el agua para llenar la piscina es importante tener claro el tipo de instalación con la que se cuenta. En la actualidad hay dos tipos de piscinas principales:
La piscina desbordante
Son modelos en los cuales el agua sobresale por el perímetro de la piscina, ya sea por un solo lateral o el conjunto. Estos modelos cuentan con un sistema de reabastecimiento en el que se produce el filtrado del agua. Uno de los modelos más famosos en la actualidad es el infinity pool.
La piscina de skimmers
Son los modelos más tradicionales. El nombre hace referencia al hueco de la parte superior que cuenta con una lengüeta. Ese espacio es el destinado a la absorción y renovación del agua.
El llenado de la piscina desbordante
Llenar una piscina desbordante es sencillo, no cuentan con una medida específica. Simplemente, se deben llenar hasta que el agua comience a desbordar y pueda completar el circuito de manera natural. Es importante que siempre cuenten con un mínimo desbordamiento aunque estén vacías.
El llenado de la piscina con skimmers
En el caso de las skimmers, la tarea puede resultar algo más compleja. Serán estos elementos los que fijen el punto de llenado óptimo. Para lograrlo es importante detener el agua en el momento que alcancen la altura media de la boca. Gracias a ello se conseguirá que el sistema funcione de manera eficiente.
Si se llena en exceso
Si se excede esta medida pueden aparecer problemas. El equipo de trabajo no será capaz de absorber el caudal de agua que le llega suponiendo una deficiencia en la limpieza.
Si no se llena lo suficiente
En caso contrario, se puede comenzar a introducir aire en el interior del sistema. Esto provocará que la bomba trabaje forzada derivando en problemas que pueden afectar al resto del equipo.
No llenar la piscina de la manera correcta puede derivar en daños que reduzcan la vida útil de los equipos. Esto supondrá un sobrecoste en el mantenimiento de la piscina. Por ello es importante prestar atención cuando se proceda al llenado de la misma.
El agua varía según el clima diario
Cuando la piscina está en funcionamiento sufre las consecuencias del clima. Las lluvias pueden aumentar la cantidad de agua y el calor puede provocar el efecto contrario debido a la evaporación. Esto último suele ser lo más habitual, ya que el verano es la época de uso de esta instalación. Para prevenirlo se pueden recurrir a diversas soluciones como la manta solar o apostar por una cubierta para piscina que reduce la evaporación en más de un 70 %.
Saber hasta dónde llenar la piscina de casa y asegurarse de que está siempre a la altura correcta protege los sistemas de depuración a la par que asegura un agua más limpia. La cantidad correcta de agua aumenta el disfrute de la piscina.