Aunque las cubiertas de piscinas protegen el agua para que sus condiciones sean óptimas durante todo el año, entre otras funciones, es importante tener en cuenta que las algas crecen con facilidad en este medio por diferentes causas. En este artículo se da respuesta a cuáles son los factores que propagan el desarrollo de estos microorganismos y cómo usar antialgas para piscinas en función de si se quiere efectuar una prevención o eliminación de los mismos.
¿Cuándo pueden aparecer algas en las piscinas?
En primer lugar, tenemos que tener claro que las algas aunque no representan un peligro para la salud, se multiplican con rapidez, sobre todo en aguas templadas y calientes. Sin embargo, gracias a ellas, lo hacen también hongos y bacterias, los cuales sí que convierten el agua de la piscina en insalubre con su aparición. Sin embargo, para que tenga lugar esta reproducción deben darse ciertas circunstancias. Esto puede ocurrir cuando:
- No hay una óptima circulación del agua.
- El sistema de filtrado del agua no realiza su función adecuadamente.
- No existe un equilibro en el nivel de pH del agua o en los desinfectantes a añadir.
- La limpieza del fondo y paredes de la piscina no se hace con frecuencia.
- El agua de la lluvia descontrola el equilibro de todos los niveles.
Teniendo en cuenta estos factores y siempre adelantándose a las circunstancias, es crucial aplicar la dosis recomendada de antialgas, llamado también alguicida, en las piscinas. Se dice recomendada porque, por ejemplo, no será la misma cantidad rutinaria, que si un día se reciben invitados en casa o si se prevé que haya una tormenta.
¿Por qué emplear antialgas en piscinas?
Estos productos químicos no solo ayudan a mantener el agua de la piscina limpia, sino que también colaboran en que se conserve en buenas condiciones para la salud. Por consiguiente, con su empleo, se evita que estos microorganismos se propaguen con facilidad y se instalen en las paredes o fondo de nuestras piscinas.
En caso de haber cometido errores en la prevención de algas, esto se revelará al detectar que el agua está turbia o las paredes o suelo de la piscina son viscosos o resbaladizos. Para erradicar el problema, será necesario emplear el antialgas, ya no en modo de prevención sino de eliminación.
¿Cómo aplicar alguicidas en la piscina?
Desde Vegametal queremos explicar cómo utilizar este producto, en función de si queremos prevenir o eliminar algas ya depositadas en nuestra piscina. Esto es así porque los tratamientos serán distintos.
Las algas se encuentran más cómodas en niveles de pH altos, por lo que será conveniente efectuar análisis de pH, a través de pastillas, medidores de gotas, fotómetros o tiras analíticas, para asegurarnos de que los niveles están comprendidos entre 7,2 y 7,4.
Para prevenir la aparición de algas
- Recomendamos emplear semanalmente entre 0,5 y 1 litro de antialgas por cada 100 metros cúbicos de agua.
- Queremos recalcar que, antes de aplicar el alguicida por toda la superficie, aconsejamos realizar una limpieza del vaso de la piscina, bomba y cestas del skimer.
Para eliminar algas de la piscina
- En caso de que el equilibrio de conservación del agua se haya roto, recomendamos usar entre 1 y 2 litros de antialgas por cada 100 metros cúbicos de agua.
- De la misma forma que con el otro método, deberemos aplicar el producto por toda la superficie del vaso de la piscina, especialmente en las zonas donde haya más presencia de estos microorganismos.
- Utilizar un cepillo especial para limpiar la piscina producirá heridas en las algas y, a través de ellas, penetrará el antialgas correctamente.
En conclusión, esperamos que, con la información de este artículo, los usuarios comprendan la importancia del uso del antialgas para piscinas para ganarle la batalla siempre a estos microorganismos.